46% (950 millones de toneladas) se elimina de manera insostenible. Mientras Martins (2021),
señala que la contaminación del aire generada por la quema de combustibles fósiles como
carbón y petróleo causó al menos 8,7 millones de muertes a nivel global, así, una de cada cinco
muertes en el mundo ese año se debió a la contaminación causada por emisiones de plantas
generadoras, fábricas y vehículos, entre otras fuentes.
En tanto en Perú, el Ministerio del Ambiente (MINAM, 2019) sostiene que en Lima Metropolitana
y el Callao se generan 886 toneladas de residuos plásticos al día, representando el 46% de dichos
residuos a nivel nacional, mientras el 15% de especies afectadas por ingestión y enredamiento
con basura marina plástica se encontrarán en peligro de extinción. Asimismo, el departamento
de La Libertad y la capital Trujillo no se encuentran excluidos de la contaminación donde el
parque automotor es la principal causa de contaminación del aire debido al uso de los
combustibles fósiles, refiere Fernández (2016), en relación a Trujillo, al que le sumamos las
fundiciones de refinerías, fábricas industriales y agroindustriales quienes producen altos
contaminantes como dióxido de azufre dióxido de nitrógeno, monóxido de carbono entre otros.
El principal río de la ciudad de Trujillo, el río Moche, es uno de los más afectados por la
contaminación tanto por empresas mineras en las partes altas, como por desechos sólidos en la
parte baja, según SIAL Trujillo (2021), entre las consecuencias en el ecosistema tenemos que han
desaparecido en ciertos sectores toda forma de vida animal. Es por ello que, mediante Decreto
Supremo N° 204-2020-PCM en el año 2020, se declara el Estado de Emergencia en los distritos de
Quiruvilca de la provincia de Santiago de Chuco, Agallpampa, Salpo y Otuzco de la provincia
de Otuzco; y a Poroto, Laredo, Trujillo, Huanchaco, Moche y Víctor Larco Herrera de la provincia
de Trujillo, del departamento de La Libertad, por peligro inminente ante contaminación de
aguas superficiales del río Moche.
Todo lo plasmado líneas atrás solo es un pequeño vistazo a la realidad tanto local, nacional y
mundial respecto a la contaminación ambiental y es a partir de ahí que se buscan culpables
para juzgarlos por sus actitudes y comportamientos responsabilizando a las personas, a las
autoridades, al gobierno, entre otros agentes, sin embargo, a contraste de ello en este artículo
se definen las bases teóricas que permitan construir una propuesta de taller educativo a fin de
transformar paulatinamente esos conocimientos, valores y prácticas ambientales del público en
general, pero yendo a uno de los centros principales de formación y transformación de los
jóvenes y niños que son las instituciones educativas.
El contexto pandémico en el que se encuentra la sociedad puede ser tomada como una
limitación u oportunidad, se optó por la segunda postura, para encontrar las bases teóricas y
realizar un taller educativo en la que la interacción de los jóvenes permita crear un producto y
transformar la realidad.
Las investigaciones precedentes a esta como la planteada por Rosa (2015) respecto a
funcionalidad del taller como estrategia para alcanzar la comprensión lectora demuestra la
efectividad del mismo. También investigadores como Sánchez (2017) con su taller de creación
de historietas para mejorar la producción escrita y a Chan (2019) con el taller Cupio para
incrementar la autoestima de los jóvenes, quienes confirman la efectividad del taller.
En tanto, en las investigaciones propositivas vinculadas al taller educativo y la conciencia
ambiental, de acuerdo con Laso (2018) quien diseñó una propuesta didáctica que permita
incrementar la conciencia ambiental en los estudiantes. Además, Mata (2021), quien en su
propuesta plasma una metodología en función a proyectos que permitirán incrementar la
sensibilización ambiental en los estudiantes de secundaria. Y, Rueda (2017) quien elaboró una
propuesta de programa educativo para formar la conciencia ambiental en los estudiantes el
cual alcanzó una validación positiva.
Por otro lado, en investigaciones aplicativas vinculadas al taller educativo y la conciencia
ambiental, ejecutadas en Perú, Mallcco (2019) quién usó el taller didáctico de actividades
lúdicas para desarrollar la conciencia ambiental en los estudiantes, dando como resultado que
este método influye de manera significativa en el desarrollo de la conciencia ambiental de los
jóvenes. También, Maraví (2015) quien usó el trabajo de campo, método similar pero no igual al
taller educativo, para desarrollar la conciencia ambiental concluye que este tiene un efecto
favorable en el desarrollo de la conciencia ambiental de los estudiantes. Asimismo, Pérez (2018)
con su programa COGVI aplicada a los estudiantes de educación secundaria logró aumentar
significativamente la conciencia ambiental en los estudiantes.
Así mismo, en las investigaciones regionales Olivo (2020), cuyo objetivo de demostrar que el
programa desarrolla la conciencia ecológica en sus estudiantes de educación secundaria se
cumplió, puesto que los resultados obtenidos demuestran su efectividad. Además, Arteaga et.
al (2017), desarrollaron el Taller las 3R’S ecológicas para fomentar la conciencia ambiental, lo-
grando cumplir su objetivo puesto que se evidencia un cambio positivo en las tres dimensiones
de la conciencia ambiental las cuales son: Cognitivo, afectivo y procedimental. Y, finalmente
Loyola y Rodríguez (2018) quienes ejecutaron el programa denominado “Manitas Verdes en